Sonia Braga: "Adoro la pasión de los argentinos"

Notícia em espanhol ( to com preguiça de traduzir, mais ta facíl de entender)

En medio de celebridades locales y de políticos en campaña, una morocha paralizó la fiesta de los premios Perfil, fue la actriz Sonia Braga, que filma en el país la versión brasileña de Amas de casa desesperadas.

Divina, la figura que dejó a todos flotando en el aire anoche durante la fiesta de los premios Perfil fue, sin ninguna duda la brasileña Sonia Braga, que deslumbró con su belleza despojada pero contundente.

La mujer, que alguna vez tuvo en cine dos maridos, llegó al hotel Sheraton de Retiro pasadas las 21.30 y enfundada en un sencillo traje de corte masculino, con el cabello suelto y sutilmente maquillada.

En declaraciones exclusivas a p erfil.com , la actriz se mostró feliz de su estadía en el país debido a la filmación de la versión brasileña de Amas de casa desesperadas, donde interpreta a Cecilia Monteiro, el personaje que se suicida en el primer capítulo y que después se convierte en la narradora de la historia.

“Me quedo sólo unos días y lo lamento, porque adoro la Argentina, que es el país latinoamericano con el que más me identifico, por su cultura y por la pasión del fútbol. Nosotros tenemos ese mismo sentimiento, esa misma pasión que ustedes tienen con Maradona, pero con Pelé”, comparó la diva en un castellano perfectamente entendible.
Braga trabajó durante todo el lunes y martes, probó vestuario y grabó escenas para la versión brasileña de Amas de casa desesperadas, la producción de Buena Vista International Television Latin America, realizada por Pol-Ka para REDE TV . Ambos días llegó temprano a Manzanares, el barrio donde transcurre la tira, y que ya fue usado para las versiones argentina y colombiana.

Comentó que pudo asistir a la fiesta de los Premios Perfil, sólo porque el director brasileño de la tira, Favio Barreto, hermano de Bruno Barreto, quién dirigió a la diva en Doña Flor y sus dos maridos, le confirmó que hoy miércoles no tendría un día de trabajo demasiado duro. “Trabajar con Favio es trabajar con un familiar, soy amiga íntima de su hermano que ya me dirigió y de toda su familia”, asintió la impactante morocha.

La celebrity, de 57 años, despilfarró glamour en la fiesta y demostró una vez más que conserva la misma sensualidad que desplegó en los 70 cuando estalló su popularidad. Tampoco escatimó ni una pizca de simpatía, hasta le regaló un pequeño video a un fanático que se acercó con su celular: “Precioso, ¿qué vas a hacer luego de esta fiesta?”, actúo la diva frente al pequeño teléfono y le regaló un “chuic”, que el joven jamás olvidará.

La Braga, que regresará en unos días a Brasil, contó a perfil.com que pronto viajará a los Estados Unidos invitada por el propio Al Pacino al tributo que el actor recibirá por su trayectoria, “soy su actriz brasileña preferida”, dijo orgullosa para después entregarse a las cámaras que devoraron su belleza.